miércoles, 2 de noviembre de 2011

Algo nunca es nada, siempre es algo...

Vuelvo una noche más para decirte cosas que nunca te diré, las que nunca imaginarás, de las que siempre te dejan boquiabierta, siempre hasta el final.
Te contaré que me encanta llorar, necesito hacerlo para sentir que aun sigo aquí. Me encanta el momento exacto en el que la lagrima me produce una sensación de picor por la mejilla. También cuando pasa de ser una a muchas, ese momento es tan...

La sensación de tranquilidad que ello conlleva para mi, es superior a muchas de las cosas que deberían relajarme. Llámame raro si quieres, yo prefiero llamarlo x, porque esto siempre será un factor a tener en cuenta, del cual no nos podremos evadir nunca, ni puedo ni quiero.

El verde de mis días expresa tantas cosas que no tendría tanta tinta en un solo bolígrafo para enumerarlas todas, por eso prefiero hacerte llegar otras cosas menos importantes como que...a veces es mejor pisar el orgullo y luchar por cosas "imposibles" porque esas pisadas en el camino dejarán huellas. Pasos en los que saldrás malparado, no te lo niego pero te sabrán casi a victoria.

Una vez más te diré que me encanta llorar por la sonrisilla que mi cara produce. De todos es bien sabido que sonreír es bueno para vivir.

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