martes, 21 de enero de 2014

No todo es tan blanco como lo pintan...

Y ahí vuelven los fantasmas del pasado, lo que te hacían perder el control de tus decisiones y lo dejaban a la presión del momento. Ahora existe algo que antes no había, ahora existe el miedo. Miedo a no dar la talla, a fracasar, a sentir que has perdido el tiempo, pero hazte ver a ti mismo o a ti misma, que no, que no es así.

No te tortures pensando en que hubiese sido si..., sino en como puedes arreglar lo que no hiciste ayer, en como hacerte ver que eres capaz de llevarte todo eso por delante. Y no, no te tacho de pesimista, más bien todo lo contrario, hasta los más positivos, tienen sus puntos de flaqueza, pero ahí está su capacidad para decir por ahí no pasas.

Creo que el miedo es cíclico, que nunca se termina de ir, porque siempre hay cosas nuevas por las que sentir desconfianza, por muy seguro de ti mismo que te encuentres.
Por eso mismo, estés donde estés, cierra los ojos, cuenta hasta tres, hasta diez, o un millón si hace falta, pero estate seguro de tus posibilidades, de tus capacidades y de tu fuerza. Se seguro de ti mismo, porque si fallas ahí, estarás perdido, tal vez, por mucho tiempo.

4 comentarios:

  1. El miedo destruye la felicidad!!
    Me gusta lo que has escrito :)

    ResponderEliminar
  2. No hay que darlas cuando lo que se dice es cierto jajaja xD
    Quizás me equivoque pero escribes de una manera simple que hace que se sientan las cosas y lo simple es bonito!! :))

    ResponderEliminar
  3. En este me hiciste sonreír. Es impresionante como la casualidad me ha traido a leer esto en el momento justo. Por cierto soy Kristhian, suena con el tuyo pero se escribe con otra combinación de letras... Los caprichos de los padres. Es el quinto escrito en mi lectura. Saludos

    ResponderEliminar