sábado, 15 de octubre de 2011

A cambio no pido nada...

Sigo con ganas y cada día más de morderte los labios hasta sentir que no te vas a ir nunca más,otra vez.
Me encanta mirarte cuando el sol choca contra tu sonrisa y contra tu cara de empanada. Me cuesta mucho imaginarme la distancia que durante ratos nos separa. Y no por ello soy o dejo de ser más idiota, tengo un 110% de chico guay y estoy muy loco, si tu supieses cual es la mayor de mis locuras estoy seguro de que me abofetearías otra vez más.
Te voy a agradecer tantas cosas como ni siquiera tu te imaginas, a pesar de todo, todo está lleno de despedidas pero aun mi tren no parte, me puedo quedar un ratito más.
Aquí sigo un día más y aunque la vida pase rápida, cuando yo me vaya no te echaré de menos, recuerda que las cosas duran durante un tiempo determinado y después... después nada.
Así que espero que mientras dure, bajo la constelación de mi habitación montemos un minimundo en el que no nos falte de nada, ni ganas de odiarnos, ni ganas de marcharnos, ni tampoco ganas de mirarnos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario