"Él vivía a su manera, creía no
necesitar a nadie. Al fin y al cabo vivía la vida de tal modo que parecía que
la gente le sobraba (a pesar de estar siempre rodeado). La imagen que él
mostraba al mundo, era diferente a la que yo vi. Lo vi de lejos, lo intuí de
cerca. Nos utilizamos para el bien, pero al fin y al cabo nos utilizamos. Él es
ese gran amigo, que ni siquiera es amigo. Es alguien incondicional, pero
plagado de condiciones. Así es él, o al menos así lo vi.
Sin lugar a duda es él mismo en
todo momento, sin dejarse influenciar en su manera de actuar. Muñeco roto que
tira para delante. Imagen fuerte con la que no me consigue engañar. Muy
consciente de sus capacidades, y no hace como la mayoría de las personas, él
muestra y reconoce sus habilidades. Lo cual me parece muy auténtico y digno de
admiración.
Con las palabras se abre al cien
por cien, mostrando sin miedo lo que tanto escondió en su día. Descubriéndose a
sí mismo lo que no se atrevería a reconocer de no haberlo escrito. En sus
escritos deja ver, no sólo un lado sensible, si no un lado firme ante la vida.
Una dureza que en ocasiones incluso podría parecer de hielo, pero que por otro
lado acaba derritiéndose.
Inacabado rompecabezas formado
por extrañas piezas."
Hoy traigo un texto que me ha dedicado una persona que me conoce demasiado bien, ella es un tanto especial para mi. Su nombre es Sara y os dejo su blog para que le echéis un vistazo. Y si os gusta, no dudéis en comprar su nuevo libro "Empática Sara". Os dejará con ganas de más.
Gracias :)
ResponderEliminarMe alegro de que me veas como alguien especial.
Si es que en el fondo eres un niño bueno :P
Ya sabes que cuando quieras, tendrás un hueco aquí :)
ResponderEliminar